lunes, 23 de febrero de 2009

Pluma Urbana



Por: Edgar León

Consumatum Est: La línea esta dada


Eran las siete de la mañana -demasiado temprano para que mi celular sonara- de un salto me puse en pie y camine rumbo a la cómoda en la cual el aparato originaba un ensordecedor sonido, oprimí el botón de aceptar y a través del auricular escuche las palabra de un amigo que presagiaban un final que para muchos había sido casi, casi profetizado y, para otros más escépticos era un movimiento transversal de 180 grados, su frase fue: “Esta consumado, la línea esta dada”.
Pasaron dos horas posteriores al mensaje, las palabras del mismo fueron demasiado penetrantes, cual taladro en mis ideas, fue así que desde esas horas de la mañana revoloteaban en mis pensamientos, acudí a mi centro laboral, revise los principales diarios, la pasividad de mi oficina, la falta de exaltación de algunos fanáticos y sobre todo la falta de efervescencia me mostraba un rostro diferente al que mi colega había generado en mis ideas, fue así que decidí y determine eliminar por completo el impacto de la “Rumorología” en mis pensamientos.
Fue así que el día 16 de Febrero continuaba su curso, en lo particular el conocer los resultados y las decisiones del revolucionario institucional rumbo a la elección de su candidato a gobernador era de vital importancia, la balanza fiel de las determinaciones podría generar una imagen virtual de los escenarios en los comicios del 5 de julio del 2009, así mismo de los acomodos de las piezas priístas en estos procesos.
Rayaban ya las doce del día y mi celular volvía a anunciar una llamada entrante, la idea que hasta ese momento había desaparecido de mis pensamientos resurgió de nuevo, -ahora sí- me dijo la voz tras el auricular -ya no hay vuelta de hoja: El “Purux es el bueno”-, la frase cual balde de agua fría sucumbió en mis adentros, “Mis apuestas” pensé rápidamente.
El hacerme el desentendido hasta casi el medio día había sido una buena técnica para tratar de evadir la realidad, pero más allá de tratar de comprender el porque de la determinación del PRI, pensaba en mis intereses particulares, el siquiera tener que pensar en pagar era algo muy difícil del olvidar y poco digno y así, aturdido entre ambos pensamientos pase a la siguiente fase de los procesos psicológicos el duelo, la negación ya se había acabado.
La rumorología a eso de las dos de la tarde ya había perdido su estricto sentido de rumor, más bien las confirmaciones cada vez provenían de figuras más eminentes, más certeras, ¡Oh Dios mió!, pensaba, pero al ingresar a mi correo electrónico ya no había vuelta atrás, el Revolucionario Institucional daría a conocer a las siete de la noche una importante noticia, fue entonces que tome el teléfono y le llame a aquel amigo que desde tempranas horas hubo de perturbar mi dulce descanso, acertadamente solo pude pronunciar la frase que dejo sembrada en mis ideas: ¡Consumatum Est: La línea esta dada!.
Basto preguntar posteriormente entre los doctos del café, de aquellos de la buena mata, de los politólogos de la experiencia y, mis esperanzas de mantener mis centavos eran mas que nulas, de hecho muchos de ellos aseguraron desde el domingo posterior al anuncio a eso de las doce de la noche, la resolución ya era un hecho.
Cuando ya el reloj de este 16 de Febrero marcaba las 6:45 de la tarde me atavíe en una guayabera blanca y pantalón de mezclilla, encendí mi vehículo y fiel a la cita llegue a las 7:00 de la noche al auditorio Priísta “Héctor Pérez Martínez”, decenas de personas esperaban a las afueras del sitio y ni que decir del interior, corazones, mantas, yo aún seguía aturdido.
Lentamente el tiempo se fue consumiendo, eran así ya las 7:30 de la noche, de pronto un alboroto irrumpió la aparente tranquilidad del sitio, Alejandro Moreno Cárdenas, Jorge Luís González, Carlos Felipe Ortega Rubio y Víctor Méndez Lanz ingresaron entre una lluvia de aplausos, pero los empujones, los jaloneos y los gritos empezaron segundos después, en que finalmente Fernando Ortega Bernés ingreso al local y en que decenas de voces coreaban la frase: “Unidad, Unidad”.
Para Fernando Ortega “El Purux” como le han bautizado sus adeptos y simpatizantes, este era el mejor día de su vida, hubiese querido compartirlo, pero para no ser insistentes mis sensatas apuestas no me permitían ni gritar, ni celebrar con los “puruxistas” de hueso colorado.
FOB venia ataviado de una camisa de vestir blanca, sonriente, su tramos de acceso fue difícil saludaba y besaba a cuanto militante podía, hubo tardado así unos 20 minutos, hasta llegar al ex gobernador Antonio Gonzáles Curi, de quien se dice en años pasados tuvo algunos altercados, y a quien efusivamente saludo y tras once palmadas sello un pacto de transición que muchos no se hubiesen esperado, posterior a esto Fernando subió al podium y fue recibido por sus ex competidores, quienes a diestra y siniestra del ungido estuvieron toda la noche.
El primero en tomar el micrófono fue Raúl Aarón Pozos Lanz, quien saludo a los presentes y dejo el micrófono abierto para que unos de los ex aspirantes Priístas diera a conocer la declinación a favor de Ortega Bernés y sin mas preámbulos el ilustre Senatore y aclamado nadador, Alejandro Moreno tomo la palabra y se desvivió por el senador con licencia, Fernando Ortega, durante su intenso mensaje que hay que reconocer fue bastante emotivo, por momentos de hecho se presentaron algunos aplausos, pero el verdadero éxtasis fue cuando finalmente el precandidato Priísta se pronunció.
Fernando Ortega reconoció la madurez de su partido, de sus ex adversarios, y sobre todo afirmó que es el tiempo de Campeche y para Campeche y de toda su gente.
Resaltó el trabajo que ahora le espera, dijo tener la convicción de una lucha a favor de nuestra entidad y sobre todo de mantener la gubernatura, fue así que ya no pude ni dudarlo más, una lagrima rodó en mi mejilla mientras mis compañeros se arremolinaban tras la mesa frente al podium, no, no era de emoción quiero aclarar, mas bien de dolor y tristeza y no por la elección del afamado “Purux” más bien por la desbancada de lana que sufriría posterior al evento.
Fue así que no hubo de otra, cual hombre de palabra cumplí mi paga, y en ese rumbo me entere de algunos acuerdos que fueron los que lograron que finalmente Fernando lograra su sueño, aquel que hace seis años había buscado pero que Jorge Carlos obtuvo, según me dijeron algunos expertos en la materia y digo expertos por que yo aún no lo soy, la cosa quedo así, para que Carlos Felipe se hiciera a un lado le prometieron la alcaldía, para que Víctor Méndez hiciera lo suyo- que mas que oportunidades fue premio de súper consolación-le prometieron la gran comisión del congreso del estado y para Alejandro Moreno “Alito” pues un puesto para cuando termine su sexenio en la senaduría y finalmente para que “El Arqui”, el contendiente mas difícil de Ortega declinara a su favor le prometieron una diputación federal.
Finalmente tras el cuadro de análisis que me presentaran y ya en mi cama a punto de dormir, no me quedo de otra más que pensar mientras cerraba mis ojos, hoy sí, esto no es un sueño: Consumatum Est, la línea ya esta dada.